El presidente de Banco Sabadell, Josep Oliu, en una imagen de archivo

El presidente de Banco Sabadell, Josep Oliu, en una imagen de archivo EUROPA PRESS

Business

Oliu gana tiempo para proponer una alternativa a la endiablada operación de BBVA

El consejo de Banco Sabadell pone en valor que podrá generar capital para distribuir 2.400 millones hasta 2025, con el fin de convencer a sus socios o dar al oferente una guía para mejorar la propuesta

7 mayo, 2024 00:00
Cristina Farrés Raúl Pozo

Noticias relacionadas

El rechazo por parte del consejo de Banco Sabadell a la oferta de fusión que el BBVA le trasladó la pasada semana no marca el final de la partida, sino un primer movimiento defensivo con el que el presidente de la entidad nacida en Cataluña, Josep Oliu, ha logrado algo de tiempo para dar el siguiente paso: el diseño de una alternativa que convenza tanto a los más escépticos del órgano de gobierno como a los accionistas de que la negativa a la proposición es lo mejor para el banco.

Esa alternativa o plan B tiene como base la propia estrategia de crecimiento de la entidad, que bajo la batuta del equipo conformado y liderado por el consejero delegado, César González-Bueno, ha llevado a Banco Sabadell a superar todos los objetivos del plan a tres años que finalizó en diciembre e incluso haber revisado ya al alza algunos objetivos para 2024, fijados hace apenas tres meses. 

2.400 millones para los socios

En la nota remitida en la tarde de este lunes a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), en la que se da cuenta de la decisión del consejo respecto a la propuesta de BBVA, Banco Sabadell incluye guías sobre su capacidad para generar capital y pone cifras concretas a la distribución del exceso de éste entre sus accionistas. 

La entidad apunta en este sentido a una cifra en torno a 2.400 millones de euros para este año y el próximo, resultante de la suma del exceso de capital a distribuir y los dividendos recurrentes. Números que hasta la fecha no habían trascendido. 

De hecho, el propio Oliu dio en la última junta de accionistas del banco, celebrada hace algo menos de un mes en Alicante, la indicación genérica de que la entidad retribuiría a los socios con el capital que excediera del 13% en la ratio CET1 fully loaded

El consejo del banco asegura que la estrategia forma parte del "firme compromiso con la creación de valor para el accionista y respaldado por el plan de negocio de la entidad y la sólida generación de capital". Una afirmación que respalda la opinión de que "como entidad independiente generará un mayor valor para sus accionistas".

México y el socio David Martínez

Consciente de que no podía presentarse en el consejo solo con el argumento de rechazar la propuesta del BBVA, al estimarla insuficiente, Oliu necesitaba poner encima de la mesa un camino alternativo, un motivo de peso para trasladar el mensaje a los accionistas de que, como ya sucediera a finales de 2020, seguir en solitario es la mejor opción. 

Y más que a cualquier consejero o socio del banco, el mensaje va dirigido a David Martínez, uno de los más destacados empresarios mexicanos, que cuenta con una participación del 5% en Banco Sabadell y constituye, por ese hecho, una excepción en un banco sin dueño. 

El presidente del BBVA, Carlos Torres / BBVA

El presidente del BBVA, Carlos Torres / BBVA

Llegado a este punto y con la propuesta de BBVA encima de la mesa, el magnate mexicano se dibuja en el futuro como el más tentado por la oferta, toda vez que la entidad que preside Carlos Torres lidera el mercado financiero en el país azteca. 

De esta forma, una integración permitiría a Martínez formar parte del líder indiscutible de la banca en su país, aunque su participación en el banco resultante quedara diluida a poco más del 1% dada la diferencia de tamaño con el Banco Sabadell. México aporta algo más de un 55% del beneficio de BBVA.

Una señal de precio

Tampoco conviene olvidar que la oferta de BBVA incluye, en lo referido a la gobernanza, un puesto de vicepresidente, al que podría optar Martínez en un futuro. Y el cargo, aunque no sea ejecutivo, es de prestigio en México. Cabe recordar que los estatutos del banco de origen vasco limitan la edad de los miembros del consejo en los 75 años. Justamente los que Oliu cumplió hace apenas un par de semanas.

Además, las citadas guías numéricas también actúan como una suerte de "señal de precio" dirigida al consejo del BBVA. Es decir, en el caso de que sigan interesados en la operación, ésta debería incluir el capital y los dividendos que el Sabadell prevé distribuir a corto plazo.

El presidente de BBVA, Carlos Torres (i), y el de Banco Sabadell, Josep Oliu (d)

El presidente de BBVA, Carlos Torres (i), y el de Banco Sabadell, Josep Oliu (d) Fotomontaje de CG

De incluirse esa cifra de 2.400 millones, la prima que incluye la propuesta que el consejo de la entidad vallesana acaba de rechazar se elevaría al entorno del 55%, frente a la del 30% que contempla la original.

"El consejo considera que la propuesta infravalora significativamente el proyecto de Banco Sabadell y sus perspectivas de crecimiento como entidad independiente", reza la nota remitida al supervisor. De esta forma, BBVA ya cuenta con una pista sobre qué debe contener una posible oferta mejorada.

Controlar el reloj

Precisamente antes de que llegue, que incluso podría ser en forma de opa hostil, Oliu necesitaba una resolución firme del consejo y no dejarlo para más adelante, a fin de controlar los relojes del proceso. Con la respuesta, el veterano banquero gana tiempo, pero, a la vez, no detiene la partida.

Por ahora, la reacción de BBVA ha consistido en lamentar "que el consejo de Banco Sabadell haya rechazado una oferta tan atractiva". Sin señal alguna de darse por vencido; la partida de prevé larga y ya se esperan los próximos movimientos.